Contenido creado por Gerardo Carrasco
Cultura

Un adiós

Murió el arquitecto Artucio, benefactor y defensor patrimonial ante “problemas de gestión”

Donó a Montevideo y Maldonado su colección de 5.000 azulejos, con piezas invaluables. En 2023 denunció problemas en el museo fernandino.

06.06.2025 07:15

Lectura: 4'

2025-06-06T07:15:00-03:00
Compartir en

Falleció en las últimas horas el arquitecto uruguayo Alejandro Artucio Urioste, destacado profesional, investigador, escritor y coleccionista de azulejos ses (Pas-de-Calais).

La triste noticia fue divulgada por la Intendencia de Maldonado, departamento que se vio beneficiado por una importante donación del profesional.

Durante cuatro décadas, Artucio reunió una colección de más de 5.000 azulejos.  Su colección incluye variedades de azulejos utilizados en la arquitectura uruguaya, especialmente en Montevideo, desde la época de la colonia hasta mediados del siglo XX. También contiene azulejos traídos de Argentina, Holanda, Francia, España, México, Portugal y Brasil.

En el año 1997 le donó a la Intendencia de Maldonado una buena parte de su acervo, lo que permitió la organización del Museo del Azulejo Francés que se encuentra albergado en la Casona del Arboretum Lussich.

En 2004, otra parte del acervo recopilado por Artucio fue donado a la Intendencia de Montevideo, lo que a su vez permitió inaugurar el Museo del Azulejo en la capital, situado en las calles Yí  y Mercedes. En 2014, su colección fue declarada Monumento Histórico Nacional.

Escribió varias obras que constituyen el más completo estudio sobre el origen, tipología, relevamiento e historia de los azulejos ses y su vinculación con el Río de la Plata: El Azulejo en el Río de la Plata. Siglos XVIII y XIX; Catálogo de azulejos estanníferos ses del Siglo XIX en Uruguay, Argentina y BrasilEl azulejo en la arquitectura uruguaya. Siglos XVIII, XIX, XX; y Uruguay. Arquitectura de antaño. Siglo XVIII, Siglo XIX, y principios del Siglo XX; entre otras. 

La polémica de la cafetería

En el año 2022, el museo instalado en la casona Lussich, en Maldonado, atravesó una profunda reforma. Meses más tarde, Artucio y otros donantes de patrimonio lamentaron que el museo se transformara en una cafetería, perdiendo su cometido original ye exponiendo el patrimonio al deterioro y hasta el robo.

“Asombro e incomprensión me causó la noticia de que el Museo del Azulejo Francés de Maldonado fue remodelado, pasando de ser museo a decoración de una cafetería”, dijo entonces el arquitecto en una publicación que se divulgó en redes sociales.

“Nunca imaginé que no se respetaría la instalación original, retirando las vitrinas y pegando los azulejos directamente a la pared como decoración de una cafetería al alcance de cualquiera que se los quiera llevar, comprobamos que ya faltan algunos”, sostuvo.

Artucio consideró “incomprensible” que “un grupo de azulejos del 1700, siendo piezas de colección muy valiosas, estén pegados en la parte exterior de la casona, tan ligeramente al alcance de las personas y fácilmente sustraíbles. Cabe destacar que de los azulejos expuestos actualmente faltan piezas fundamentales y los de más valor para cualquier coleccionista, como ser el ‘Hombrecito del Azulejo’ (que inspiró al escritor argentino Mujica Lainez para escribir un cuento) y dos figuras más que ignoro dónde se encuentran”, escribió entonces.

“Cuando hice la donación, nunca pensé que en un futuro se pusiera en peligro la colección usando las piezas para decorar, pegadas de tal forma que iten ser robadas o que simplemente se despeguen terminando rotas en el piso, pero que además permitan que algunas de las piezas pasen a manos de particulares”, lamentó por entonces.

El entonces director general de Cultura, Jorge Céspedes, aseguró a la sazón en entrevista con FM Gente que “no hay pérdidas de piezas” y que se “restaurarán las actuales y efectivamente se instalarán en el lugar acordado”.

“No hay desmontado del Museo del Azulejo Francés, no hay faltantes de piezas, sólo hay una diagramación nueva, mantenimiento de las piezas y la sustitución de la señalética antigua, que estaba muy deteriorada”, aclaró el funcionario.